Quizás lo más sensato sería adelantar mi fin de año, brindar conmigo misma y prometerme que voy a cambiar todas esas cosas que no gustan, pero si lo hiciera dejaría de ser yo, y prefiero sentir que no me importa, que seguiré viendo mi vida en mis canciones favoritas y lloraré al ver llorar a los personajes de las películas, que me aguantaré las ganas, que diré una y mil veces que no lo haré y lo acabaré haciendo, pero que no he cambiado más de lo que me cambia el paso del tiempo, que sigo siendo yo. Por ello brindo, sí, pero por mí, por todas mis manías y por poder decir por una vez ''No es por mí, es por ti'', porque yo sigo siendo yo, pero tú ya no eres tú.
jueves, 6 de noviembre de 2014
Por mí y por todas mis manías.
Por no saber ni cómo, ni cuándo, ni dónde pero tener claro el con quién. Por dibujar una sonrisa en mi cara cuando por dentro estoy gritando de rabia y me ahogo en mis propias lágrimas. Por mentirme a mí misma con todos los ''Da igual'' que no dan igual. Por hacer un mundo de cosas insignificantes y esperar que me entiendan cuando ni yo misma me entiendo. Por desordenar mi mente cada día un poco más y no ser capaz de encontrar la salida de mi laberinto. Por creerme lo que no es cierto y crear esperanzas donde no las hay. Por imaginar y sentir demasiado, por confiar en mi realidad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario